martes, 10 de febrero de 2009

BIZARRÍA REAL - FICCIONAL Y VICEVERSA


Inaugurando una sucia esquina mas en este blog, donde podré compartir con todos ustedes algunos episodios remarcablemente extraños y no tanto; donde realidad y prosa insólita danzarán en una crónica de existencia, que pretende todo menos ser una delicia literaria ya que carece de fórmula y finalidad, es mas en esencia un exorcismo en el que trataré de compartir todos los pequeños y sucios detalles acerca de una manera particular de percibir la existencia mundana, rescatándolos de los rincones mas apartados de mi memoria donde seguramente serían aniquilados por un malsano sentido de la vergüenza y racionalismo. Por lo que el autor se deleitará de la misma manera si opinas que es lo mas subversivo o lo mas estúpido que has leído en tu vida. Así que no seas engañado por la pompa y el boato querido lector; que solo es una puerta adornada que conducirá a pequeños y sucios callejones mentales.
Lo de bizarría, antes de seguir adelante, tiene más que ver con el valor que implica el acto, que con lo bizarro del contenido lo cual es espantosamente irónico.

PRIMERA ENTREGA - PROBLEMAS CON LA REALEZA.

Mi niñez no es ni de lejos mi época favorita de mi hasta ahora efímera existencia, (efímera si la comparas con la vía láctea o las curvas de Laetitia Casta), no es que no haya disfrutado como los demás niños, de hecho era un niño promedio de esos que se disparan con una pistola de clavos en la cabeza para que sus padres les dediquen algo de atención, ya saben….un niño estándar. El divorcio de mis padres cuando tenía seis años no solo propició una era de autosuficiencia en muchos aspectos, (no voy en este fragmento a deliberar acerca de los efectos del divorcio de mis padres en mi psique, eso sería bastante revanchista y marica y el hecho de que no me haya colgado como percha en una esquina solitaria de mi casa o no haya acabado vendiendo productos de adelgazamiento en una secta piramidal, es evidencia de que hicieron un trabajo regular)…decía; esto cambió mucho el panorama de existencia en mi hogar desde los detalles mas insignificantes, que iban desde poder expresar tu opinión libremente o poder deliberar de fútbol, religión o política en la mesa sin que te caiga un golpe despiadado, hasta usar el baño de manera discrecional o sea mas de los dos minutos “campo de concentración” que se estilaba antes de la partida de mi padre. Ya se lo que están pensando….el papa de este hombre debe ser un monstruo, la verdad este modelo de padre era muy popular allá por los 80’s, y si me preguntan el accionar de estos valientes hombres evitó el advenimiento de bastantes estupideces como la moda Emo, la idea de que el Fernet es un trago rico o el triunfo del socialismo hasta entrados los dos miles; eso o mi masoquista intrínseco disfrutaba con el despliegue innecesario de violencia. Pero volvamos al asunto del baño ya que allí se desarrolla este primer episodio.

Ahí estaba sentado en el trono, con las manos sujetando mi quijada, pensando en que podía hacer con todo este precioso tiempo que ahora tenía, me resultaba muy extraño no tener que forzar mis intestinos, y no hacer nada me creaba un estúpido sentimiento de culpa, el poco espacio que te da para moverte en esa precaria posición era un problema; que cosas se pueden hacer asi?....mmmm…..por lo menos había que leer algo, y por supuesto una mujer recién emancipada como mi madre tenía que tener en el baño la Biblia de la mujer “moderna” (en ese entonces por lo menos) estoy hablando de VANIDADES, la lujuria y el libertinaje terminaron por encumbrar a COSMO en la nueva década pero esa es otra historia; ahí estaba con esta extraña revista en la mano, un episodio disparatado de orgullo había evitado que lea algún buen cómic o un semi-decente libro en el baño. Ahí me encontraba ojeando este pasquín incendiario que habría sido la envidia de cualquier revolucionario anarquista de cepa, “Hombres: esos curiosos animales y donde cazarlos”, “Conviértete en la jefa de tu jefe” “Usa el sexo como un arma” y otras cosas por el estilo; esta celebración a la estupidez era fascinante, pero seguía sin llamarme la atención; la crítica de cine no era mejor “No muy tierna”, “No ensalza los valores familiares” “Final incomprensible e ilógico”, algo si era seguro, el baño era el lugar correcto para esas publicaciones. Fue ahí que de repente, sin haberlo planeado…me enganché de la crónica que hacían semanalmente de la vida de los Reyes y sus parientes; me parecía fascinante la necesidad de las mujeres de todo el mundo desde el lugar mas próspero hasta los lugares mas precarios, de saber si se les curó la seborrea a los hijitos de lady D, o si la hermana de la princesa de Mónaco se había fugado con otro imbécil cirquero. Puede ser debido a que la sangre de todos mis antepasados esclavos o siervos de la tierra de algún imbécil se inflamaba con la decadencia monárquica. Era una realidad: habían enganchado a alguien más y al mas improbable; era mi secreto sucio…me pasaba veinte minutos diarios leyendo acerca de la “duquesa de esto”, “que la reina aquello”, que los sucesores al trono de tal país resultaron ser todos homosexuales, tarados, delincuentes y degenerados no en ese orden necesariamente. Mi pobre madre ha de haber pensado que estaba dando rienda a mi deseo y sentidos en vez de estar gestando una condición psicológica de bizarras y curiosas proporciones como se verá adelante.

Mi madre tuvo que viajar a España y una vez mas cambió mi hogar, sintiéndome libre hice lo que haría cualquier persona honorable en mis zapatos, vender todas sus pertenencias a precios irrisorios (por lo menos las que consideraba basura o baratas… ¿que creen que soy….un monstruo?). Fue así que toda la colección de VANIDADES fue a parar donde el peluquero de la Villa al precio de 50 bolivianos que en ese entonces era una maldita fortuna. Me sentía orgulloso de mi mismo, seguro de haber cerrado un negocio redondo, o por lo menos eso pensaba cuando de pronto…..el horror….
Sin verla ni temerla fui atacado por un episodio de estreñimiento de escaladas apocalípticas; estaba afectando todos los aspectos de mi vida, tenía esa mirada perdida, característica de todos los estreñidos, los endeudados hasta el cuello y los novios engañados alrededor del globo, estaba perdiendo la alegría de vivir, había que hacer algo….Entrar al baño se había convertido en un ritual de proporciones satánicas…incienso, música new age, hasta fundamentos básico de yoga y demás cacas, y esa era la premisa!!!….CACA me decía a mi mismo…CACA….”Grandes éxitos de Menudo”, “Juventud en éxtasis”,” Superman IV”…CACA….”Tele evangelistas”, “Infomerciales”, “Batman Forever”…..CACA…no había vuelta que dar, la idea de acabar yo mismo con mi miseria rondaba mi mente, cuando ocurrió lo inimaginable:
Estaba escuchando el noticiero, cuando en el sector internacional hablaron algo acerca de cómo la reina Victoria se había caído en la ducha…..mis intestinos se abrieron como las puertas de un Kinder cuando suena el timbre de recreo…mi agilidad y desesperación salvaron mi dignidad y mi casa de convertirse en un cuadro del Bosco. Tuve que afrontar el terror…mis intestinos y la realeza habían realizado esta extraña comunión…no podía entrar al baño sin escuchar o ver algo de la monarquía, por meses tuve que cargar con un penique que me había regalado mi abuela para poder hacer popó viendo la cara de la vieja reina; me sentía como un imbécil…eso sin contar las veces que a algún malnacido se le ocurría hablar de “Enrique octavo” o “El rey sol” en el trabajo y al ver como emprendía la delirante carrera hacia el pasillo creía que me había indignado por que opinaba que los reyes católicos deberían volver a regir este lado del mundo.

Con un supremo esfuerzo esto quedó en el pasado hace ya varios años, tuve que pasar por una terapia de desintoxicación de estupidez, hipnotismo e inclusive regresiones, donde en una suprema ironía de destino, descubrí que en alguna vida anterior fui rey de un lugar de mala muerte.

Supongo que la moraleja si existe alguna, es que no importa que tan insignificante y estúpida pueda parecer alguna pieza de pseudo literatura, sigue teniendo poderes y consecuencias insospechadas…..lo sabrás esta misma noche cuando tengas una pesadilla acerca de esto que acabas de leer. La insignificancia que acabas de ver es el punto final de esta entrega.

2 comentarios:

  1. hermano, un post maestro, has convertido el sagrado ritual de la caca en una excelsa muestra bloggera de fuerza y coraje... más fuerza que coraje creo (se necesita fuerza para ir al baño) un abrazo grande dude!

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  2. "es hilarante por que es cierto"...supongo que si vas a hablar de tus romances con la psicosis, hay que hacerlo con algo de humor...gracias por el apoyo snif...XD

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